Soltis, festival de luz en Bruselas
Para las celebraciones de fin de año y de comienzo del siguiente, la ciudad de Bruselas tiene por primera vez al Festival de la Luz «Soltis», en el que tres artistas internacionales, un británico, un belga y un francés; diseñaron una serie de iluminaciones para la parte de Petite Ceinture, entre la plaza Rogier y la plaza Louise.
Después de la caída de la noche, todos los visitantes tanto belgas como extranjeros, están invitados a visitar seis instalaciones de luces que son muy artísticas, originales y le dan un toque de juegos e inocencia a las noches invernales de la ciudad de Bruselas.
Además de estas instalaciones, la agencia de transporte público local STIB se unió a estas celebraciones con una iluminación a un gran número de tranvías de la línea 94, durante toda la duración de este festival, así los visitantes pueden entrar en la atmósfera desde que van hacia los lugares.
En la Plaza Rogier se encuentran dos instalaciones. Una es realizada por el artista británico Jason Bruges quien creo una experiencia interactiva en la que los visitantes juegan un papel primordial. Él utiliza sensores para detectar la presencia, los movimientos y los colores de las personas y va cambiando de acuerdo a ellos. Otra es en la Torre Dexia que tiene un trabajo interactivo que convierte los colores y texturas captados por una cámara y los proyecta hacia el cielo, convirtiendo el edificio en un gigante regalo navideño.
En la Plaza des Barricades el artista francés Victor Vieillard juega con los colores y las luces para brindar una especie de «terapia invernal». En ella los visitantes pueden salir del caos y ruido de la ciudad para disfrutar de un baño de increíbles luces que forman una especie de arco iris gigante que hace olvidar el frío.
Ese mismo artista puso un anillo de luz verde por el Anillo del Camino Interior, que es minimalista y está colgado entre los árboles de esta Avenida des Arts. En la Plaza du Trone, el británico Bruges puso una especie de árboles de luz que cambian su iluminación con el sonido. Así cualquier conversación, el sonido de los zapatos al caminar o de los automóviles hace que cambien sus formas.
En estas épocas de dar y recibir regalos, el artista belga Koert Vermeulen decidió hacer de la parte alta de la ciudad un lugar para los regalos de luz. Así desde la Plaza Stéphanie, desde donde empieza este itinerario, los visitantes son guiados por árboles iluminados hasta el Porte de Namur en donde los regalos de luz parece que caen del cielo.
Fotos Vía: Soltis.be