La Cueva de Lorette en Rochefort
Bélgica es hermosa tanto por lo que se ve como por lo que esconde. Porque en sus entrañas guarda también tesoros inmensos de la naturaleza, que han ido tallándose con el paso de los siglos.
Nuestra visita la rendimos hoy a la ciudad de Rochefort, ciudad valona situada a poco más de cien kilómetros al sur de Bruselas, y a unos cincuenta de Namur, la capital de la región.
Allí se encuentra la Cueva de Lorette, situada a unos dos kilómetros a las afueras de la población, una hermosa gruta de piedras calizas formada por la eterna erosión de los ríos Lesse y Lomme. No es la única cueva que se halla en los alrededores. Muy cerca se pueden visitar también las Cuevas de Han y las de Hotton, en un recorrido que, en los últimos años, se ha vuelto muy turístico.
Si embargo, la Cueva de Lorette posiblemente sea la más bonita, espectacular y visitada de las tres. Antes de bajar a la gruta veremos el documental Videokarst. A partir de ahí la visita nos llevará al interior de la cueva, con una fantástica visita a la Cámara del Sabbat, en el que nos espera un espectáculo de luces y sonido a más de sesenta metros de profundidad. La duración de la visita a la cueva es de una hora y media aproximadamente.
La particularidad de esta cueva es el hecho de ser muy vertical, a diferencia de otras cuevas en Bélgica. La bajada es tremendamente pronunciada, hasta llegar a la Sala Sabbat. La oscuridad en el interior es total y, a medida que vamos caminando, iremos encontrando poco a poco la luz. De ahí que el espectáculo de luces y sonido sea tan fascinante.
– Información adicional
- Horarios: La Cueva de Lorette abre del 4 de abril al 6 de noviembre exclusivamente para aquellas personas que lo soliciten previamente. En los meses de abril, mayo, junio, septiembre y octubre abre todos los días, excepto los miércoles, con visitas a las 10.30, 12.00, 13.30, 15.00 y 16.30 horas. En julio y agosto las visitas se producen de 11.00 a 17.00 horas cada 45 minutos, excepto del 1 al 10 de julio y del 24 al 31 de agosto que se producen cada hora y media.
- Precios: La entrada a la gruta cuesta 8 euros para los adultos y 5 euros para los niños entre 3 y 12 años. Las visitas guiadas se pueden hacer en francés y neerlandés todos los días. Si queréis, podéis avisar con antelación para que os la hagan en inglés o alemán.
Foto Vía: Ardenne Residences